Langostinos estilo Sichuan
Fácil 20 minutos 2
- 500 g. de langostinos
- un puñado de pimienta de Sichuan
- sishimi togarashi
- 5 cucharadas de mirin
- 4 cucharadas de salsa de soja
- 1 cucharada de azúcar moscovado
- 1 chile rojo
- 1 chile verde
- Shichimi togarashi
Para preparar esta receta de langostinos estilo Sichuan, lo primero que debemos hacer es tostar los granos de pimienta de Sichuan para sacar todos los matices que atesora esta mágica especia china. Una vez tostados los granos de pimienta de Sichuan en una sartén sin aceite debemos molerlos antes de utilizarlos con los langostinos hasta convertirlos en polvo y reservamos.
A continuación elaboramos la salsa que utilizaremos para dipear los langostinos. Mezclamos en un bol el mirin, la salsa de soja, el azúcar moscovado y picamos el chile rojo y el chile verde que añadiremos al bol para darle punch a la salsa. Si no quieres que pique demasiado puedes retirar las semillas de los chiles y añadir únicamente la carne troceada para que aporte sabor y el picante sea moderado.
Pelamos los langostinos y les quitamos el intestino. Ponemos a calentar una sartén con unas gotas de aceite de oliva y salteamos los langostinos. El marisco demasiado hecho queda gomoso, a mi no me gusta esa textura, prefiero que por dentro queden jugosos. Cada cual que los prepare a su gusto. Cuando tengan el punto deseado añadimos el polvo de pimienta de Sichuan que habíamos reservado al principio.
El toque final corre a cuenta del shichimi togarashi, esa mágica mezcla japonesa de especias que combina un aroma cítrico con un ligero picante. Por último emplatamos los langostinos estilo Sichuan y servimos junto con el bol de salsa de soja y chile para dipear con los langostinos salteado. Toca disfrutar sólo o en buena compañía, con una copa de vuestro vino favorito. On egin!
- El personal e interesante toque de aporta la pimienta de Sichuan
- No cocinar en exceso los langostinos
Soziedad Alkoholika – Cuando nada vale nada
Los chicos de Soziedad Alkoholika siempre combativos y llamando a las cosas por su nombre. Al pan pan y al vino vino, como tiene que ser. Y el que se pica… ajos come. Pues eso, cuando nada vale nada. Un temazo de los gateiztarras.